LA VUELTA (de) ESPAÑA (y de los ESPAÑOLES)
"Esto va de humanidad no de izquierdas o derechas" (*)
(*) Publicado como respuesta a Isabel Diaz-Ayuso en la Red social X
No hace falta comentar nada de lo sucedido este pasado
domingo en Madrid donde estaba previsto que acabara la última etapa de la 80ª edición de la Vuelta Ciclista
a España.
No fue
así porque esta competición ni podía ni debía terminar como si en Palestina no
estuviera pasando nada. Ni en el mundo tampoco.
Nada que
comentasr - decíamos- porque las imágenes hablan por las mil palabras ociosas,
repugnantes que se escupen a diario por los “hunos” y los otros.
Y dado
que estábamos allí mismo, vimos lo que todos pudieron ver en directo televisivo: Un Río
de gente española sin tributos ni atributos y un Mar de banderas
palestinas ondeando ajo el cielo azul.
Nada más.
Nada menos.
Ya se
sabía desde que la Carrera penetrara en territorio nacional español (había
empezado en el Piamonte italiano… muy coherentemente) no iba a ser un paseo de
rosas ni para la Organización ni para la Serpiente Multicolor -que así llaman al sufrido Pelotón de corredores y a sus variopintos equipos.
La muy
razonable razón no era otra que la presencia de una muy distinta “Serpiente”
(ésta letalmente venenosa) que reptaba entre los participantes en forma de
arrogante magnate sionista canadiense -amiguete del genocida Netanyahu, por
cierto – propietario de un equipo ciclista profesional pedaleando bajo bandera de
Israel con un solo ciclista de esta nacionalidad y, para más inri, un director
deportivo español dimisionario.
Una
presencia provocadora justo a punto de cumplirse los dos años de la Unilateral
Guerra de Exterminio ejecutada a vista del entero planeta por la Etnocracia israelí,
y justificada por un injustificado “Derecho a defenderse” que incluye siempre un
ineludible deber de seguir destruyendo y ocupando una tierra arrebatada a sus legítimos
pobladores a los que no dudan en seguir expulsando y masacrando impunemente
tras cien años de limpieza étnica.
“Ni
olvidamos ni perdonamos. La venganza es nuestra; hemos jubilado a Yahvé que lo sepáis”
Sin
embargo, algo ha cambiado este pasado domingo en la denuncia del Genocidio contra
Gaza y contra Palestina entera (Cisjordania es la siguiente…) a todos los niveles. Y ha
sido concretamente en España.
Este es
un hecho sin precedentes en la defensa de la Justa Causa palestina en las
Colonias norteamericanas de Europa en los últimos tiempos.
Hecho que
indudablemente va a marcar un antes y un depues en la visión que de nuestro pais y
de nosotros mismos se tienefuefra y dentro de España. Debemos estar preparados
No
importa.
Digan lo
que digan unos y otros., desde dentro y desde fuera..en la hora actual o en un futuro no
muy lejano, este es un Tiempo de Resistencia y Unidad.
Ciertament,e dicho
está ya en el epígrafe. “Esto va de humanidad”. Una Causa que es esencialmente
una Vindicación de lo Humano. Una Acción/Verdad realizada -insistimos en ello-
en este este caso concreto por una Humanidad concreta: la “humanidad española”. Dicho
sea, sin jactanca, tonto orgullo o burdo chovinismo filantrópico.
No por
otro motivo hemos titulado esta Entrada La Vuelta, no a España, sino de
España (que ni estaba muerta ni de parranda); y con ella el retorno de los de los
españoles y españolas que malgrè lui (“pardon” por la francesería) lo
son por positiva condición o por vocación perdida; o incluso como algunos casos
que conocemos bien, por Gracia divina o por putada del Destino
Vale con
esto., Que cada cual sepa qué terreno moral pisa y qué responsabilidad adquiere respecto
al bien y al mal, frente a la verdad y la justicia.
Vivimos
sí pero no convivimos en una seudosociedad laminada, trastornada por los
gestores de lo Contra Humano. Una sociedad que se puede decir “diabolizada” ("Diablo" etimológimente significa "el que miente y el que DIVIDE"...) hasta límites difícilmente concebibles por -me atrevo a decir- entidades no humanas.
Basta.
“Hay que ser absolutamente o no ser en absoluto”, sentenció Parménides muy griego él.
Pero en nuestro
caso lo dijo mas claro y mas alto Don Francisco de Quevedo , hablando para sí y para su tiempo; hablando tambien para las españolas y los españoles de ayer, de hoy y de siempre. No de los de "nunca" que estos siempre haylos:
Bien sé a cuantos contradigo, y reconozco los que se han de armar contra mí, mas no fuera yo español si no buscara peligros, despreciándolos antes para vencerlos después
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